La regla tras el parto: todo lo que debes saber
Después de tantos meses sin la regla, ¿cuándo me va a volver?
Muchas os hacéis esta pregunta después del parto y nuestro consejo siempre es el mismo: hay que tener paciencia. Tanto para las que antes del bebé hayáis tenido ciclos tan puntuales como un reloj como para las que, por el contrario, siempre hayáis sido irregulares, la regla no os vendrá automáticamente después del parto. ¡El cuerpo tiene que readaptarse a los cambios hormonales!
¿Cuándo me volverá la menstruación?
La primera menstruación suele aparecer entre las 4 y las 8 semanas posteriores, pero si estás amamantando lo más probable es que no te venga durante los primeros seis meses o incluso que se alargue hasta el final de la lactancia. Lo cierto es que no hay un tiempo determinado para esta vuelta, ¡cada mujer es un mundo!
Primer ciclo menstrual: ¿Será distinto a los anteriores?
La primera menstruación después del parto suele ser bastante abundante. Además, es común que los síntomas que tenías antes de concebir hayan cambiado: muchas mamás que padecían reglas dolorosas notan mejoría por la ausencia de rigidez muscular del útero.
Para algunas este cambio es permanente, pero en muchas ocasiones, cuando la situación se normaliza y el útero vuelve a su estado habitual, las reglas acaban siendo como eran previamente.
He tenido un sangrado. ¿Es la regla?
Durante la etapa postparto es posible que experimentes pérdidas vaginales llamadas loquios, unos sangrados que pueden alargarse hasta los 50 días desde que tuviste a tu bebé. Por tanto, si tienes un sangrado durante esta etapa, lo más seguro es de que no se trate de tu primera regla, sino de algo puntual.
¿Si me vuelve la regla tendré menos leche?
Aunque no debería producirse una bajada de producción, muchas mamás sienten que sí les pasa. Además, durante la menstruación la leche puede cambiar de sabor y volverse algo más salada, lo cual provoca en ocasiones que el bebé lo note y mame menos. ¡Pero no tenemos que preocuparnos! En pocos días todo vuelve a la normalidad.
¿Tienes más dudas? ¡Pregúntanos lo que quieras! Recuerda que siempre puedes contar con el abrazo Comat.
Salud bucodental de la embarazada
¡Son muchos los cambios acontecidos en el embarazo! Y sí, también puede resultar afectada durante la gestación la salud bucodental de la embarazada.
- Hasta el 50% de las embarazadas experimentan náuseas y vómitos durante el primer trimestre del embarazo. En casos severos y frecuentes de hiperémesis gravídica (0,3%) este problema puede provocar una importante erosión del esmalte dental.
- Los cambios en la composición de la saliva durante el final del embarazo y la lactancia pueden predisponer temporalmente a la erosión y a la caries dental.
- La xerostomía fisiológica (sequedad bucal) es otro problema común durante el embarazo causado por los cambios hormonales.
Todos estos aspectos hacen que la gestante sea más propensa a que su salud bucodental se vea afectada, aunque aquellas afecciones más recurrentes son las siguientes:
- Gingivitis. Consiste en una inflamación de las encías que provoca que estas se enrojezcan, hinchen y despeguen de los dientes.
- Dientes flojos. Otro problema importante en relación a la salud bucodental de la embarazada es que puede aparecer cierta movilidad de los dientes durante la gestación, dando la sensación de que nuestros dientes están “flojos”. Esto se debe a que las hormonas pueden afectar a los ligamentos que sujetan el diente.
- Periodontitis. La periodontitis es la causa más común por la que se pierden los dientes si no es tratada. Esta pérdida se debe a la acumulación de placa y sarro que genera una infección e inflamación de las encías provocando la pérdida de soporte óseo.
- Granulomas del embarazo. Es una lesión abultada localizada en la encía y que sangra con facilidad. Son benignas y de crecimiento lento. Por lo general son blandos y pueden doler al principio. Su evolución comienza a partir de la zona de unión de dos piezas dentarias y a veces alcanzan un tamaño considerable.
- Caries dentales. Las caries se producen cuando los ácidos de la boca descomponen el esmalte de un diente (el esmalte es la capa exterior, muy dura del diente). Durante el embarazo podemos tener más ácido en la boca, simplemente por el reflujo (bastante frecuente) que aparece desde el principio del embarazo. Por ello es más probable que aparezcan o empeoren las caries. Y si se suma que tienes náuseas del embarazo y vomitas con frecuencia, aún tienes más ácido en la boca, así la situación es más favorable a la aparición de las temidas caries.
- Caída de dientes. Si tiene caries o enfermedad de las encías grave, es posible que se tus dientes se vean afectados o quizá tu dentista deba extraer alguna pieza a modo preventivo.
Si quieres mantener tu salud bucodental a raya durante todo el embarazo y posparto, no olvides seguir estas recomendaciones:
- Visita a tu dentista al menos una vez durante el embarazo, preferiblemente en el segundo trimestre, ya que estarás más cómoda.
- Cepilla los dientes y las encías cuidadosamente al menos dos veces al día, y no olvides pasar el hilo dental cada día entre los dientes.
- Utiliza pasta con flúor para evitar las caries y un cepillo suave para evitar las náuseas.
- Evita las bebidas y los alimentos azucarados, limítalos sólo a las comidas y no los tomes nunca entre horas.
- Enjuágate a diario con un colutorio adecuado.
- Come alimentos nutritivos. La alimentación sana te aporta importantes nutrientes a ti y a tu bebé en crecimiento. Los dientes de tu bebé comienzan a desarrollarse entre los 3 y 6 meses de embarazo. Los nutrientes, como calcio, proteína y vitaminas A, C y D, ayudarán a sus dientes a crecer sanos.
- Limita los dulces. Ingerir demasiados alimentos o bebidas ricas en azúcares puede dar lugar a las caries dentales. En lugar de bebidas carbonatadas, bebe agua y escoge alimentos sanos como las frutas, vegetales y productos lácteos.
Y por supuesto, no olvides que...
- El uso de óxido nitroso para la sedación no representa riesgos para la salud de la embarazada ni la del bebé (consulta siempre con el especialista).
- Debes evitar los blanqueamientos dentales durante el embarazo, ya que los agentes blanqueadores contienen peróxido de hidrógeno que favorece la liberación de mercurio de las restauraciones por amalgama.
- No es seguro tomar medicamentos sin recomendación de tu médico y/o dentista. No obstante, la mayoría de los fármacos usados en tratamiento dental (antibióticos, anestésicos locales, paracetamol) son considerados relativamente seguros durante el embarazo. Consulta con un profesional cuáles puedes tomar durante el embarazo, y en especial la posibilidad de usar determinados antiinflamatorios.
- Si puedes elegir, escoge el segundo trimestre de gestación para acudir a la consulta del dentista.
¡Tu salud bucodental te lo agradecerá!
Sangrado de implantación: qué es, cuándo sucede, cuánto dura...
El sangrado de implantación sucede a muchas mujeres al comienzo de su embarazo. ¿Sabes en qué consiste? ¿Cuándo suele darse? ¿Cómo distinguirlo de la menstruación? A esta y otras preguntas, daremos hoy respuesta en esta entrada. Si te interesa el tema, no dejes de leerla.
¿En qué consiste el sangrado de implantación?
Aunque el proceso previo es mucho más complicado, digamos que consiste en una ligera pérdida de sangre que se produce tras la anidación del óvulo fecundado en la pared del útero.
¿Cuándo sucede?
Generalmente comienza entre los días 6 y 12 después de la concepción.
¿Cómo diferenciarlo de la menstruación?
Lo habitual es que se produzca unos días antes de la fecha prevista de la menstruación, sea más ligero y dure menos que ésta, adquiriendo la mayoría de ocasiones un tono marrón.
¿Es peligroso?
No. Es un proceso fisiológico normal que sucede en ocasiones como consecuencia de la implantación.
¿Cuántos días dura el sangrado de implantación?
Generalmente dura unas pocas horas o aparece de forma intermitente durante un par de días o tres. Puede durar hasta una semana, pero no es habitual que se prolongue más tiempo.
Síntomas que lo acompañan
Es frecuente que la mujer experimente los mismos síntomas menstruales, además de náuseas, dolores de tripa ye incluso hinchazón en la zona del vientre, por la misma irrigación.
Frecuencia del sangrado por implantación
El sangrado de implantación es un acontecimiento bastante habitual (20%-30% de las mujeres lo experimentan) durante el embarazo.
¿Puedo hacerme un test de embarazo?
Te recomendamos realizártelo de 15 a 20 días después la ovulación. Esperar a que haya un retraso de la menstruación hará que suban los niveles de la hormona del embarazo, si finalmente ha habido implantación.
Si los días habituales por sangrado de implantación han pasado y continúas sangrando o estás padeciendo fuertes dolores o fiebre, acude urgentemente a tu ginecólogo.
Primer trimestre del embarazo
Si te encuentras en el primer trimestre del embarazo y además es tu primer bebé, es posible que tengas la cabeza llena de dudas: ¿puedo hacer deporte? ¿qué debo comer? ¿qué alimentos es conveniente evitar? ¿debo cambiar mis hábitos de descanso?
Hacerse estas preguntas es algo natural, pues se abre ante ti una etapa completamente nueva.
Durante el primer trimestre del embarazo (semanas 1ª a 12ª) empiezan a producirse los primeros cambios tanto en tu cuerpo como en el desarrollo fetal. Este período es el más delicado, no sólo porque empiezan las primeras molestias propias de la gestación, que detallaremos más abajo, sino porque en él existe un mayor riesgo de aborto. Es por ello que te invitamos a tomar nota de algunos consejos que te ayudarán a cuidar de ti y de tu bebé.
Primeros síntomas y/o molestias:
- Amenorrea o falta de menstruación.
- Aumento del sentido olfativo.
- Aumento de las mamas y mayor sensibilidad.
- Somnolencia.
- Náuseas y vómitos.
- Ganas de orinar con más frecuencia.
- Pequeños dolores abdominales.
Primer mes:
Durante las primeras semanas, en las que el embrión es más pequeño que un grano de arroz, puedes notar ya algunos cambios físicos tales como aumento de senos, ardores estomacales, somnolencia...
Segundo mes:
Es posible que la ropa comience a apretarte, ya que el tamaño de tu útero ha crecido considerablemente en comparación con el mes anterior. El embrión puede medir ya unos 2,5cm y la placenta crece también con rapidez.
Tercer mes:
A lo largo de este período el embrión llega a medir alrededor de 7 cm, casi como una naranja. Sus órganos ya se han formado y, aunque aún deben desarrollarse todos, ya es posible escuchar su latido cardíaco en una eco doppler. Ha concluído el primer trimestre del embarazo.
Aspectos importantes a tener en cuenta a lo largo del primer trimestre del embarazo:
- Vigila tu alimentación y sigue las recomendaciones nutricionales de tu médico y/o matrona, para que el bebé y tú estéis correctamente alimentados. No pases demasiadas horas sin ingerir alimentos: lo ideal son de 5 a 7 pequeñas comidas a lo largo del día.
- Toma ácido fólico cada día para prevenir las malformaciones en el bebé y/o cualquier otro complemento que te haya indicado tu médico o ginecólogo.
- Haz ejercicio: camina, realiza matronatación, yoga prenatal...Mantenerte activa te ayudará a mejorar el tono muscular, algo que necesitarás tanto en el embarazo como en el parto.
- Relájate. Dedica unos minutos al día a conectar con tu bebé. Ésto fortalecerá vuestro vínculo.
- Evita la cafeína, el tabaco y el alcohol.
Y por supuesto, ¡pide cita con tu ginecólogo y tu matrona! En Comat Matronas queremos acompañarte en la maravillosa aventura de ser madre.
Consejos para un embarazo saludable
Cada mujer y cada embarazo es totalmente distinto, pues estamos dando vida a personas distintas, y nuestro cuerpo reacciona de diferente manera, según la edad, o según el momento psicológico, la situación laboral e infinidad de circunstancias que puedan afectar en los nueve meses de gestación.
Pero hay algo común a todos y cada uno de ellos: debemos cuidarnos y mimarnos más que nunca para disfrutar al máximo cada día. Por ello, hoy queremos que tomes nota de los siguientes consejos:
- Si antes de quedarte embarazada practicabas algún deporte, consúltale al médico o matrona si puedes seguir haciéndolo. Y si no, busca un deporte moderado más indicado para tu nuevo estado.
- Si no practicas ningún deporte antes de quedarte embarazada, este es un buen momento para empezar a moverse un poco, podrías dar paseos diarios de unos 30 min, para ejercitar los músculos y sentirte mejor, activar tu circulación y oxigenar el cuerpo.
- No fumar desde el momento en el que decidimos tener un bebé. Si ves que no puedes dejarlo, consulta con tu médico o matrona, pues el tabaco es muy peligroso para el desarrollo de tu bebé.
- No consumir ningún tipo de droga, incluidas las bebidas alcohólicas. Son muy perjudiciales, pueden causar daños irreversibles en la salud del bebé, y por supuesto para la madre también.
- Beber dos litros de agua diaria.
- Evitar los refrescos, por su alto contenido en azúcar, si bebes intenta que sean light.
- Comer alimentos saludables, verduras frescas, frutas, pescados y carnes cocinados a la plancha o al horno.
- Evitar los fritos y los alimentos precocinados.
- Evitar la comida rápida o comida "basura" por su alto contenido en calorías vacías.
- Intenta no ir a dormir inmediatamente después de la cena.
- Intenta no saltarte ninguna de las 5 comidas diarias.
- Si puedes, descansa un rato después de comer, o incluso duerme una pequeña siesta, te ayudará a coger energía y a sentirte más descansada.
- Mimar tu vientre con cremas hidratantes, como la corporal, o puedes comprar una específica de argan, o aceite de almendras.
- Mantener tus relaciones sexuales, a no ser que el médico te recomiende reposo, disfrutar de tu pareja igual que lo hacías antes.
- Apúntate a clases prenatales y acude a grupos de lactancia. Te ayudará mucho hablar con otras mujeres, explicarles tus dudas, o consultar lo que necesites.
- Decide qué clase de pa rto te gustaría vivir, háblalo con tu ginecólogo o matrona.
- Relájate y date un baño de espuma, mímate y deja que te mimen.
- Prepara con tiempo toda la ropita de tu bebé.
- Prepara también tu maleta para el hospital.
- Llegado el momento intenta respirar y no ponerte nerviosa, seguir los consejos de la matrona y prepárate para darle la bienvenida al mundo a tu bebé.
Y ahora sí, ¡disfruta de tu embarazo!
Cambios estéticos en embarazo y posparto
Durante el embarazo tienen lugar una serie de cambios en el cuerpo de la mujer que se producen en respuesta a los cambios hormonales y a la presencia del bebé dentro del vientre materno.
En ocasiones, la estética corporal se ve amenazada por estos cambios, pero es posible prevenir y disminuir aquellos que son negativos y de esta forma sentirte mejor y más saludable.
También existen muchos cambios emocionales y en Comat Matronas sabemos que sentirte bien contigo misma ayudará a que disfrutes aún más el embarazo.
Las preocupaciones estéticas más comunes durante y después del embarazo son:
1) Celulitis y flacidez: su aparición es totalmente normal debido a que el cuerpo acumula mayor cantidad de grasa para asegurar las necesidades del bebé. Sin embargo pueden pronunciarse más como resultado de la alteración en la circulación y en el drenaje linfático que puede producirse durante la gestación. Su prevención y tratamiento se centra justamente en revertir estos dos factores junto con una dieta sana y ejercicio físico. Una vez se ha dado a luz, se pueden eliminar sus huellas a través de masaje corporal reductor o reafirmante, cremas específicas...
2) Estrías: son lesiones cicatriciales que se producen en la piel como consecuencia de la ruptura de las fibras elásticas debido a variaciones bruscas de peso y tamaño del cuerpo. Son una de las principales preocupaciones de las mujeres embarazadas ya que pueden dejar una señal difícil de quitar. Por eso lo más importante es su prevención. Como medida fundamental debe llevarse una dieta equilibrada para evitar cambios bruscos y exagerados de peso. Además se debe mantener la piel hidratada utilizando de forma continuada cremas con alto contenido en vitamina A. Una vez se ha dado a luz, las estrías pueden mejorar mediante tratamientos de medicina estética especializada.
3) Varices e hinchazón de piernas: durante el embarazo, y muy especialmente en el último trimestre, se produce una alteración en el drenaje venoso provocado por el aumento de volumen sanguíneo y la congestión pélvica circulatoria producidas por la compresión del bebé sobre las venas pélvicas, acentuada por la disminución en la actividad muscular especialmente de miembros inferiores, las posiciones anómalas, la ropa inapropiada... Esta alteración del drenaje puede llevar a una insuficiencia venosa con distensión de las venas en diferentes sectores del cuerpo (hemorroides, varices vulvares, varices en miembros inferiores). Factores como el sedentarismo y el calor pueden agravar la situación. Puedes aliviar la congestión circulatoria mediante presoterapia, drenaje linfático manual, masaje circulatorio...
4) Hiperpigmentaciones en la piel: se producen con muchísima frecuencia durante el embarazo ya que durante el mismo se encuentra aumentada la sustancia que fija el pigmento melánico a la piel llamada Hormona Melanocitoestimulante. Por eso durante este período se deben evitar las exposiciones directas al sol, especialmente durante las horas pico, y siempre al salir a la calle utilizar protector solar con factor de protección alto (más de 30). No se pueden realizar tratamientos de las manchas durante el embarazo, ya que ello requiere de una dermoabrasión. Tras el parto podrán aplicarse tratamientos muy eficaces contra las manchas residuales de la piel.